Mutación mecánica
Tic… Tac… Tic… Tac… Tic… Tac…
Te has perdido jovencita?
No, estoy buscando...
A quién buscas?
A mi corazón.
Lo has perdido?
No: se marchó, me dejó.
Y cómo sucedió?
Primero se fue desvaneciendo. Su calor huía, y el frío me invadía por dentro. Desde entonces mi corazón ya no late, sólo hace tic-tac.
Como un reloj?
Si te acercas lo escucharás.
Tic... Tac... Tic... Tac…
Vaya, no es ruido para un corazón.
No sé qué tengo en mi interior, pero no creo que sea un corazón.
Parece mecánico...
Es frío, noto resortes y clavijas moviéndose. Pero no sé qué es.
Por qué se fue?
Estaba triste y cansado, como yo... Solo que yo no puedo irme, pero él parece que sí.
Crees que volverá contigo si lo encuentras?
Creo que solo está asustado. Sólo quiero decirle que las cosas irán bien, siempre que él esté dentro de mí. No me gustaba sentir dolor, pero el vacío que siento ahora es inimaginable para mí, una persona no puede vivir sin un corazón. Cuando dejé a mi familia fui incapaz de sentir algo. Habría dado cualquier cosa para sentir pena, dolor, nostalgia, pero sólo corría por mis venas una especie de hielo metálico. Cada día se me borra de la mente uno de sus rasgos físicos. Apenas veo ya sus rostros. Debo recuperar mi corazón antes de que sea demasiado tarde y le olvide también a él. Cree usted que lo encontraré?
Eso nadie lo sabe... Sin embargo, puede que tu corazón no esté dónde lo estás buscando...
A qué se refiere?
No es lo mismo buscar una cosa que un corazón. Para buscar a tu corazón debes cerrar los ojos, en la oscuridad verás mejor.
Muchas gracias buen hombre!
Espero que tengas suerte, jovencita.
El tiempo se acaba
El tiempo se acaba. Debo tomar una decisión. Debo tomar LA decisión, pues solo hay un camino posible ante la Muerte. Tu cuerpo yace entre mis brazos, descomponiéndose. Eras la flor más bella entre todas, por eso los gusanos te escogieron a ti. Vieron en ti una presa fácil y apetitosa. Pronto te quitaron aquellos destellos dorados, el rojo profundo dejó paso al gris, fueron devorando tus pétalos uno a uno. Qué hacer ante algo que se está desvaneciendo, ante algo que ha perdido su razón de ser? La razón me dice que debo acabar con tanto sufrimiento, pero el corazón no me permite cometer un acto tan atroz... Yo te vi crecer, yo te alimenté para que fueras la más bella, debo ahora convertirme en tu verdugo? Dejarte a tu suerte, dejarte en las zarpas de gusanos y coleópteros? Díme, Lolita, qué debo hacer?